Ciclista absorta II (continuación)

Post primero de Mikel Agirregabiria, y una tercera secuela de Argiñe Areitio.

Recuerdos muy vívidos se agolpaban en su cabeza. Había transcurrido un año ya desde que acudió al aeropuerto de Manises a despedirle.

Una vez más le pidió que le acompañara, pero ella, agarrada a su mano, le suplicó que no lo hiciera. Volverían a verse en breve, le esperaría.

No pudo ser tal y como esperaba, un brusco cambio de destino laboral a Stuart lo truncó todo.

Impartía clases en la Universidad de Valencia alternando con sus trabajos de analista en el laboratorio; le costó mucho esfuerzo acceder allí, un mundo casi copado por hombres y además tan joven. Ahora estaba encantada pero el principio fue duro, la consideraban casi una intrusa; con su carácter alegre y colaborativo se hizo poco a poco un hueco y ahora era querida y respetada entre sus colegas. Sus conocimientos científicos eran muy sólidos y los que antes la miraban con gesto displicente, ahora recurrían a ella con frecuencia para conocer su punto de vista y no se tomaban decisiones sin su aprobación.

Como sucedió en aquella reunión a la que fue invitada por el rector de la Universidad; acudieron a la misma el director del laboratorio en el que ella trabajaba, el consejero de la Generalitat Valenciana de Innovación y Universidades además de una representante del Ministerio de Ciencia y Tecnología del gobierno español.  Estaba impresionada, con un sentimiento de orgullo no exento de cierto temor; era científica, y estos concilios con políticos le ponían un poco nerviosa; por experiencia sabía que eran dos campos no siempre compatibles.

Debatieron sobre la necesidad de modernizar las instalaciones, la tecnología avanzaba a velocidad de vértigo y en otros laboratorios, no sólo de Europa sino también del Estado, se había invertido con fuerza para acceder a los mejores recursos. Por videoconferencia, el jefe de la unidad de investigación de la policía autónoma vasca se sumó a la reunión; le habían pedido, como favor, que asistiera. Disponían ya de medios que hoy se valorarían en la reunión, y el conocer de primera mano su opinión era importante. Colaboraban habitualmente con ellos y Noelia sabía que eran modernos y eficaces.

La reunión fue distendida y se adoptaron al final de la misma decisiones de inversión muy importantes; entre ellas, la aprobación de compra de un potente microscopio electrónico a una empresa norteamericana con sede en Nueva York.

Los trámites burocráticos fluyeron con rapidez, y transcurridos sólo dos meses de aquella reunión,  arribaba al Puerto de Valencia el contenedor con la preciada y delicada mercancía.

Avisada la empresa adjudicataria de la llegada, ésta procedió a enviar a su equipo técnico para la supervisión y montaje del equipo. Al día siguiente de la descarga en el recinto universitario, Noelia se ofreció para recoger en Manises a los tres responsables de la instalación del microscopio.

La sala de llegadas estaba muy concurrida; yendo de un lado hacia otro trataba de que el cartel que portaba en su mano con el nombre de la compañía yanqui fuera visible.

Hasta ella se acercó un espigado muchacho; muy alto, pelo castaño abundante, sus ojos claros y ligeramente rasgados dulcificaban su rostro, levemente salpicado de antiguas marcas de viruela.

 - “Mi nombre es Stuart Haser, mis compañeros llegarán en breve, están recogiendo su equipaje.

Ha sido usted muy amable al venir a recogernos” - Aguantó un poco de más su mirada, a ella no le pasó desapercibido.

 - “Soy Noelia Bastet, encantada de conocerle. Espero que el viaje les haya resultado cómodo. Les acompañaré a su hotel” .

Autoría: Alberto Ereña

4 comentarios:

  1. Uhhmmmm....huele a historia densa y con recorrido. Valencia parece por la luz de la foto muy bien traída como opción
    Me encanta cuando los personajes se suman. Ese perfume que dejan armando la historia
    Me gustan también los pequeños detalles que describes de cada uno Espero que tenga más recorrido La historia lo merece

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  2. Vamos a ver quien se anima a continuar...puede quedar una experiencia muy bonita.

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  3. Bien, Alberto, bien, has construido una trama potente. !!!Vamos a por ella!!!

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